Hoy queremos hablar de un tema que no pasa de moda y es la gestión adecuada de los riesgos laborales para poder garantizar la seguridad y el bienestar de nuestro equipo en el lugar de trabajo, porque sabemos que sino las consecuencias son devastadoras. Como lo reporta la Organización Internacional del Trabajo. (2023), cada día mueren muchísimas personas a causa de accidentes y enfermedades alusivas al trabajo y se estima que los casos ascienden hasta 1.9 millones por año. Además, anualmente se producen unos 360 millones de accidentes laborales (no mortales) que resultan en más de 4 días de ausencias. Debemos estar un paso adelante y siempre tomar medidas para mantener el ambiente controlado. Pero… ¿Por dónde empezamos?
Primero que todo, debemos realizar una evaluación de los riesgos presentes en la empresa o en el lugar de trabajo (en caso de que nuestro equipo se encuentre trabajando desde casa). Para esto, debemos identificar los factores de riesgo que pueden ser aquellas tareas, lugares, vehículos, equipos u otras herramientas que pueden representar un peligro para nosotros. Luego, establecer medidas preventivas para evitar cualquier incidente en el futuro. Estas podrían ser:
Verificar que las instalaciones/ equipos de trabajo estén en buenas condiciones para realizar las tareas y se cuente con los accesorios de protección adecuados.
Crear campañas y programas recurrentes de entrenamiento sobre cómo evitar accidentes o cómo actuar en caso de emergencia para el equipo.
Revisar periódicamente y actualizar las medidas de seguridad en el lugar de trabajo.
Mantener un registro de los incidentes y los riesgos identificados.
Tener un plan de respaldo en caso de emergencia.
Proporcionar equipos de protección personal (en caso de ser necesario)
Por otro lado, en caso de ser trabajo virtual (o el famoso work-from-home como algunos le denominan), debemos:
Conocer las condiciones de trabajo que tienen los miembros del equipo, si cuenta con energía, conexión a internet, un escritorio y entre otras herramientas.
Capacitar a los trabajadores sobre la importancia de la ergonomía en el lugar de trabajo virtual
Establecer políticas claras para prevenir cargas masivas de trabajo y casos de acoso en línea.
Proporcionar apoyo a los trabajadores que experimentan fatiga visual, mal manejo del tiempo, dolores musculares, entre otros.
Más que cumplir metas e indicadores, nuestra principal responsabilidad siempre será el bienestar y la seguridad de todos. Por esto, es muy importante garantizar ambientes de trabajo seguros, brindar a nuestro equipo las herramientas que necesiten para desarrollar sus funciones y sobretodo, supervisar con regularidad que todo esté bien para prevenir casos a futuro. Sabemos que muchas de estas actividades son reguladas por instituciones y normativas particulares de la región en la que nos encontremos, por lo que también deben ser implementadas y acatadas para cumplir con los estándares de calidad y ser el siguiente “Great Place to Work”.
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Generalmente, los conflictos son reconocidos por ser situaciones incómodas para las personas que están involucradas. Desde cualquier acto violento, hasta la forma más sutil de desacuerdo. Sin embargo, entenderemos que es mejor enfrentar y manejar un conflicto, a evitarlo y dejarlo que crezca sin darnos cuenta. De acuerdo con la investigación de CPP. (2008), el 85% de los colaboradores experimentan algún tipo de conflicto. Por ejemplo, el 49% de todos los empleados manifiestan que la mayor parte de los problemas que experimentan en el trabajo se deben a temas personales, el 34% indican que pierden minutos y hasta horas de trabajo debido al estrés y el 33% afirma que tienen cargas de trabajo muy elevadas y no cuentan con suficiente apoyo de sus compañeros y jefes. Mientras que existe una lista interminable de posibles causas de conflictos en el lugar de trabajo, algunas de ellas son más notorias e influyentes que otras, como el mal liderazgo, la deshonestidad y dificultades en las relaciones interpersonales según indican los encuestados.
Aunque no parezca… los conflictos a veces son necesarios.
Según Robbins & Judge, enfrentarse a situaciones difíciles puede generar resultados y soluciones funcionales, como:
Incrementa el desempeño de tu equipo de trabajo, ya que nos esforzamos por responder a los retos.
Mejora la calidad en la toma de decisiones que tomamos.
Estimula la creatividad y generación de ideas innovadoras.
Aumenta el interés hacia el trabajo.
Promueve espacios de evaluación y oportunidades de cambio.
Estimula la cohesión grupal. Soy parte del grupo, pienso como el grupo y para el grupo.
Mejora la eficacia de los procesos dentro de la empresa: el conflicto genera un impacto en la “tranquilidad” y la forma en la que se realizan las actividades. Por lo que promueve que las personas se incomoden y hagan cambios para poder atender a una nueva necesidad.
NO podemos ignorar los problemas, pues las consecuencias pueden ser devastadoras. La buena noticia es que se pueden evitar con decisiones acertadas en el momento oportuno. Es importante reflexionar sobre cómo podemos fortalecer nuestra habilidad para lidiar con situaciones desafiantes y fomentar relaciones laborales saludables y eficaces. Por esta razón, aquí te compartimos 6 prácticas que puedes adoptar para identificar si existen conflictos en tu área o equipo de trabajo:
Presta atención a los comentarios y conversaciones de tus compañeros.
Observa las dinámicas de la oficina y las interacciones entre los miembros del equipo.
Realiza encuestas regulares para conocer la opinión de los miembros del equipo.
Evalúa el desempeño individual y de equipo.
Ofrece y recibe retroalimentación constructiva para prevenir conflictos.
Promueve una cultura de colaboración y apoyo mutuo.
Ahora, si ya has identificado un conflicto, es hora de tomar medidas para resolverlo de manera rápida y eficiente. Por eso, queremos compartirte una serie técnicas que nos han ayudado en algunos momentos a manejar situaciones difíciles:
Capacita a tu equipo en temas de manejo y resolución de situaciones críticas. Talleres de habilidades de negociación, sesiones de mentoría
Mediación y establecimiento de compromisos: Utiliza miembros del equipo que puedan ayudar a las partes a llegar a un acuerdo.
Comunicación efectiva: Asegúrate de escuchar y hablar de manera clara y respetuosa.
Enfoque en la solución: En lugar de centrarse en la culpa, enfócate en encontrar soluciones creativas, pacíficas y efectivas.
Discusión de casos de estudio: Analiza y discute casos de conflictos reales que hayan ocurrido en la organización o en otras empresas.
Retroalimentación y autoevaluación: Proporciona oportunidades para que los miembros del equipo reciban y den retroalimentación constructiva sobre su manejo de conflictos.
Realiza cambios estructurales y reasignación de puestos de trabajo (en caso de que sea necesario).
Evita seguir participando en el conflicto.
Los conflictos muchas veces son evitables, pero tenemos que estar preparados y contar con los conocimientos necesarios para manejar las situaciones difíciles de la mejor manera y así prevenir el caos. Con estos consejos y estrategias, podrás practicar e ir mejorando tu capacidad para gestionar el problema en el trabajo y los conflictos ya no tendrán que ser un obstáculo para el éxito tus tareas.
¿Ya tienes una estrategia en mente para identificar y solucionar conflictos en tu lugar de trabajo? Si es así, ¡nos encantaría saber más! 🤩 Con O-lab podemos seguir aprendiendo y mejorando como profesionales. Si te gustó este artículo, no dudes en compartirlo con alguien que lo pueda necesitar.
¿Quieres saber si realmente estás listo para liderar a tu equipo? 😏 Puedes descubrirlo en menos de 10 minutos con nuestro laboratorio haciendo click aquí. Si te ha gustado nuestro contenido y quieres mantenterte al tanto, echa un vistazo a nuestras redes sociales o suscríbete a nuestra Comunidad O-lab.
Para nadie es un secreto que este 2023 promete ser un año de grandes cambios y desafíos, pero también de oportunidades así que debemos estar preparados. Según un estudio de Harvard Business Review (2017), el 27% de los líderes indicaron que uno de los obstáculos más grandes que tenían para ejercer adecuadamente su rol era la falta de habilidades y experiencias que tenían. El liderazgo efectivo es clave para el éxito de cualquier empresa y un líder efectivo es capaz de motivar y guiar a su equipo hacia el logro de objetivos a pesar de los obstáculos. Pero… ¿cómo podemos desarrollar nuestras habilidades de liderazgo para empezar este año con el pie derecho?
Creemos que puedes encontrar la respuesta en este artículo. Junto a varios managers del equipo de O-lab, pensamos en compartir una lista de buenas prácticas que podrían ayudarte a entender las nuevas necesidades de los colaboradores, atraer y retener su talento y lograr resultados positivos en el menor tiempo posible:
Comunícate con asertividad: Asegúrate de escuchar, de expresarte con claridad y permitir que el equipo exprese sus opiniones y sentimientos sobre sus tareas, desempeño. La información es clave para saber cómo mejorar.
Siempre busca nuevas formas de hacer las cosas: Compartir nuevas ideas y herramientas en tendencia que les promueve una visión hacia la creatividad e innovación entre nuestro equipo.
Promueve una cultura positiva: Crea un sistema de trabajo basado en el respeto, reconocimiento y con recompensas motivacionales que permita que las personas se sientan apreciadas, comprometidas y capaces de lograr grandes retos.
Feedback, feedback y más feedback:Ten sesiones constantes de evaluación y seguimiento bilateral con tu equipo para asegurarte de que van en la dirección correcta e identificar cuando se necesita ayuda.
Establece metas claras: Comparte objetivos y responsabilidades específicas con el equipo que les permitan mantener el rumbo hacia el logro.
Empodera y promueve el ownership con tu equipo: Permite que tu equipo se responsabilice de sus tareas y tome decisiones valiosas. Esto los motivará y aumentará su confianza en sí mismos.
Learning club: Crea espacios semanales para compartir insights y aprendizajes externos que puedan aportar a mejorar las dinámicas en el trabajo y en el equipo. Pueden ser: sesiones de mentoría que les permita a todos desarrollar sus habilidades y alcanzar sus metas individuales.
Ten presente siempre que liderar con éxito no sólo depende de nuestras habilidades y estrategias… también está influenciado por lo que piensa nuestro equipo de nosotros. Algunas de las cualidades que ayudan transmitir a los miembros de nuestro equipo que somos el líder que ellos necesitan son:
Confianza: Permite que el equipo perciba que tiene el conocimiento para guiarlos al éxito en una tarea, además de la cercanía para manifestarle cualquier inquietud o dificultad que se les presente.
Competencia: Además de las consideraciones que se tengan de esta persona, tiene ser alguien preparado para ejercer su cargo. Debe contar siempre con el conocimiento para tomar las decisiones más acertadas.
Consistencia: Debe estar enfocado en lo que tiene que hacer para alcanzar un resultado. Muchas veces tocará cambiar el camino para llegar a la meta.
Integridad: Debe conocer el contexto de su equipo y de su empresa. Ser consciente de dónde se encuentran y hacia dónde quieren dirigirse.
Ser Arriesgado: Capaz de adaptarse a los cambios y tomar decisiones importantes cuando sea necesario para el logro de objetivos específicos.
Actitud Positiva: Proyectar una actitud positiva hacia las situaciones difíciles o no, permite un mejor manejo de los cambios que se puedan presentar y promueve pensamientos de capacidad en el equipo. “¡Somos capaces de cualquier cosa!”.
Ética: Ante cualquier situación que se presente, un buen líder debe mantener un comportamiento justo y acorde a las normas de la compañía o de la sociedad.
Recuerda, los malos jefes abundan y nosotros por nada en el mundo queremos ser parte de ese grupo. A través de estrategias simples pero efectivas puedes convertirte en el líder que tu equipo necesita. En O-lab, creemos en la importancia aprender juntos. ¡Comparte con nosotros tu historia y ayuda a inspirar a otros líderes a sacar su máximo potencial!
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Hoy, para ser buenos líderes debemos entender el feedback como necesario e integrarlo en las conversaciones frecuentes que tenemos con nuestro equipo y abrir el espacio para identificar necesidades, puntos de dolor y ayudar a nuestros colaboradores a desarrollarse y crecer.
Es cierto que para muchas personas, el feedback puede tener un significado negativo y al no manejar adecuadamente la situación, es posible que se creen resultados indeseados entre los miembros de tu equipo. Por esto, desde O-lab App queremos compartir contigo algunas de las buenas prácticas que nos han ayudado a mover muchas piedras del camino para poder identificar a tiempo cómo están yendo las cosas con nuestro equipo, elevar su motivación y encontrar soluciones antes de que sea demasiado tarde.
¿Por qué es necesario crear espacios de feedback con nuestro equipo?
El feedback es prácticamente un regalo para nosotros porque:
Comprendemos el desempeño de cada miembro del equipo y sabemos en qué momento debemos ofrecer o solicitar ayuda para acompañarnos en el cumplimiento de nuestras metas.
Logramos identificar hacia donde dirigir mayores esfuerzos para obtener mejores resultados.
Podemos reconocer cuando alguien hace un buen trabajo y motivar a nuestro equipo a tener niveles más altos de desempeño.
Fortalecemos las relaciones interpersonales: comunicación, confianza, seguridad y mantiene claras nuestras expectativas.
Retenemos el talento. En un mercado laboral con talento escaso y teniendo en cuenta los costos de vinculación de nuevo personal, realizar sesiones de feedback promueve el fortalecimiento de nuestras habilidades blandas y competencias laborales.
Nos da mayor entendimiento para apoyar y direccionar el desarrollo o plan carrera de los miembros de nuestro equipo.
¿Qué podemos hacer para dar un buen feedback?
Cualquier momento es bueno para dar y recibir feedback.
Pensar antes de actuar. Antes de dar cualquier paso debemos saber cuáles son las cosas que hemos notado en los miembros de nuestro equipo que pueden mejorar.
Ser objetivos y basarnos en hechos que han ocurrido recientemente. Para esto es clave hacerlo con frecuencia, entre más rápido lo integremos en nuestras conversaciones constantes, es mejor.
Orientarlo a la acción y al alcance de resultados específicos. Pensemos siempre qué haríamos diferente y comuniquemos claramente qué esperamos de los involucrados en la situación que se trae a la mesa.
Mantener una conversación guiada por la empatía, el respeto y disposición a escuchar.
¿Y tú qué haces para dar un feedback exitoso? En O-lab App nos encanta aprender juntos, cuéntanos en los comentarios qué estrategias utilizas y las cosas que tienes en cuenta para tener sesiones de feedback con tu equipo.
¡Con O-lab también puedes poner a prueba tus habilidades para dar un feedback efectivo! ¿Te gustaría practicar la forma en la que implementas el feedback con tu equipo? ¡Siempre podemos hacerlo mejor! Conoce nuestro laboratorio de aprendizaje “Cómo doy un buen feedback? 🤔 y vive esta nueva experiencia con nosotros en 15 minutos.
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